VALLE DE AYORA.

Esta mañana hemos compartido ruta Nacho, Pedro y Paco Lara y yo, a las 7,00h nos hemos puesto en camino hacia Balsa de Ves, población de nuestra provincia  que ya limita a escasos kms con la provincia de Valencia, en la que nos hemos internado para disfrutar del Valle de Ayora.

Hemos salido de Balsa de Ves con una temperatura muy fresca para lo que hemos tenido éstos días pasados, tan sólo 8ºC, y con un viento helado que soplaba con bastante fuerza y que hacía que la sensación térmica fuera de autentico frío durante el primer rato de la mañana hasta que tras unos kms las primeras rampas nos hicieron entrar en calor.

Poco después de dejar la población de Balsa de Ves nos internamos en la provincia de Valencia, y tomamos dirección hacia Cofrentes disfrutando de rampones de subida intensos y sobre todo de bajada auténticamente preciosa, envueltos por unos paisajes realmente increíbles. Todos asociamos Cofrentes directamente con su central nuclear, pero realmente pocos conocen de la riqueza natural y paisajística de su comarca, que además gracias a su orografía la hacen especialmente interesante para realizar rutas en bici de montaña, e incluso alguna con bici de carretera también caerá.

Cofrentes se encuentra ubicado en la confluencia de los ríos Cabriel y Júcar (por cuyas riberas hemos ciclado durante un buen rato), y cuenta con una superficie muy montañosa que nos ha hecho pasarlo realmente bien.

Tras ascender a lo alto de la muela y encadenar rampas de descenso rápidas, limpias y divertidas llegamos a la ribera y la seguimos hasta la población, hacemos las rampas de ascenso al castillo con una pendiente superior al 20% y salimos de nuevo de la población para hacer un bucle por la zona del pantano enlazando con rampas de subida muy divertidas y que calientan las piernas hasta llegar al embarcadero desde donde salen los barcos de recreo que llegan hasta Cortes de Pallas.

Regresamos de nuevo a la población para tomar el almuerzo, tras el cual nos ponemos de nuevo en marcha ya que toca ascender todo lo que bajamos en la primera mitad de la ruta, y realmente es mucho.

Esta segunda mitad se ha caracterizado por rampas de ascenso exigentes con porcentajes importantes y por un viento en contra que se llegaba en algún momento a agradecer ya que eliminaba por completo la sensación de calor provocada por la exigente escalada, aunque si hubiera soplado con menos fuerza también habría valido.

Han salido 59,1 kms con una total ascendido de 985m y descendido de 1022m, a una media de 17,7 km/h que no está nada mal para la exigencia de la ruta.

**Colgaré un vídeo en los próximos días cuando esté editado.